Esta segunda parte de año estuvo signada con resultados no convincentes dentro de la cancha aunque a nivel institucional Peñarol se solidificó, logrando abrir el espectro. Gerente institucional, tienda deportiva y convenios para los socios, entre otras cosas.
En el cierre del período de pases de invierno, previo al inicio de la temporada 2010-2011 llegó con bombos y platillos a Peñarol el argentino Santiago Solari. Para los aurinegros era la frutilla de la torta para reforzar al equipo que además había incorporada a sus compatriotas Nicolás Domingo y Jonathan López, también arribaron a los aurinegros Mathías Corujo y Fabián Estoyanoff.
Distintos nombres se manejaron para reemplazar a Diego Aguirre, entre ellos se mencionaron al peruano José Del Solar, Pablo Forlán y Fernando Morena. Apoyado por un sector de la prensa y con el voto conforme de una amplia mayoría de los consejeros aurinegros, Manolo Keosseián asumió el reto. Su inicio fue positivo, ya que eliminó al Barcelona de Guayaquil con sendos triunfos, en el marco de la Copa Sudamericana, pero después perdió con Goiás de visita y ganó en el Estadio Centenario pero fue eliminado por saldo de goles, lo que marcó un mojón negativo para los dirigidos por Manolo.
En cuanto a lo local, hasta la mitad del Apertura, Peñarol logró llevar la vanguardia, posteriormente perdió unidades y terminó renunciando cuando el aurinegro cayó ante Defensor Sporting a falta de dos fechas para terminar el Apertura. Eso significó la partida prematura del entrenador, que por momentos se puso en contra de la prensa diciendo que estaban en su contra y diciendo que el equipo jugaba mal, cuando en realidad !jugaba muy mal!. .
Con la conducción interina de Edison Machín, Peñarol terminó el campeonato, derrotó a Central Español y pareció sacar la cabeza pero en el epílogo del Apertura y en la última fecha, perdió con Racing desnudando enormes falencias.
Fuente: www.larepublica.com
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