A las tres de la tarde del jueves, el presidente de Peñarol, Juan Pedro Damiani, todavía estaba en Buenos Aires por motivos laborales. La actividad para el resto de la jornada era: a media tarde ir a Aeroparque, tomarse un puente aéreo, del aeropuerto de Carrasco a la concentración de Los Aromos, de ahí a su domicilio particular (“para saludar”) y después sí, al Estadio Centenario, a sufrir con su equipo. “Me aíslo un poquito, me hace bien estar lejos”, confesó al programa Quiero Fútbol el dirigente que también dijo esperaba con “tranquilidad” el partido de esta noche (no quiso hacer pronóstico alguno).
“Me comentaron que había 37 mil entradas vendidas más los abonos, con lo que llegaríamos a las 50 mil”, expresó, mientras se frotaba las manos pensando en la jugosa recaudación. Antes de pasar a un tema urticante, adelantó: “El estadio que pretendemos tendría 40 mil personas sentadas, un poco menos que el Centenario, pero primero debemos calificar para la Intendencia de Canelones”. El estadio de Peñarol, qué tema; un proyecto que hace tiempo viene amagando que se puede concretar pero que por una u otra razón queda estancado.
Entonces Damiani se pone serio y, ante la consulta de cierta molestia por parte de Nacional y de algunos vecinos del Parque Roosvelt (donde se construiría el estadio) con el tema del futuro estadio, explica: “Es evidente que la molestia no es a nivel institucional, sino de la gente; es difícil de entender. Nosotros no nos preocupamos por lo del Parque Central, hasta lo vemos con buenos ojos. Además no nos podemos robar los clientes entre nosotros y esto es una gran ventaja”. Y luego, da algunos argumentos que piensa sostienen su idea del nuevo estadio: “Es insólito que haya en Uruguay un solo estadio FIFA; estamos hablando de una obra que daría trabajo a mucha gente, de entre 20 y 25 millones de dólares. Ir al estadio no es solo los 90 minutos: es antes, durante y después”.
Asimismo, sostuvo que los socios tendrían la prioridad con el tema de las entradas, y que de esta manera se motivaría la llegada de nuevos asociados. Por su parte, es un proyecto en el que están involucradas empresas constructoras, de publicidad y hasta un estudio jurídico, y en el que están contemplados estudios de tránsito y ambientales. “El viernes 8 de abril presentamos nuestra propuesta”, finalizó Damiani con este tema. Pero antes de cortar confirmó los rumores de Zalayeta: “Tiene ganas de jugar en Peñarol”.
Fuente: www.urugol.com
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