Cada clásico es diferente, para los jugadores y también para los hinchas. Es por eso, que las barras de aliento de uno y otro equipo practican diferentes formas de recibir al club de sus amores, en busca del color, el calor y la originalidad.
Ayer el Centenario volvió a mostrar un muy buen marco de público en sus tribunas, y el recibimiento a los futbolistas de Peñarol volvió a conmover a los presentes. Una enorme cantidad de bengalas amarillas se desplegaron por toda la Ámsterdam, acompañadas por las ya tradicionales banderas de palo.
Los morteros comenzaron a hacerse sentir, los fuegos artificiales (su ingreso estaba prohibido) y el furor de la gente le dieron un calor imponente a la salida al campo de juego del conjunto mirasol. Obviamente, durante el partido, ambas hinchadas se dedicaron cantos mutuamente y al final, gracias al resultado, la fiesta terminó del lado de Peñarol.
Fuente: www.quenonino.com.uy
COLECTIVO ABITAB 7663 - LOS PIBES DEL PALACIO - LA FIESTA SIEMPRE EN DOS COLORES
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