miércoles, 2 de marzo de 2011

Martinuccio se acercó al de antes

Alejandro Martinuccio mantuvo una charla con Diego Aguirre días atrás, en la que el jugador le manifestó al entrenador su deseo de jugar como puntero y no de volante por izquierda, ya que no es su posición natural, y sentía que no le estaba aportando lo que el equipo necesitaba.

Pues bien. Lejos de molestarse, Aguirre colocó al “Porteño” de punta, relegando del equipo al capitán, Antonio Pacheco. El cambio salió bárbaro, ya que Martinuccio jugó un muy buen partido, y su velocidad fue determinante para que Peñarol pudiera sacar contragolpes punzantes.

El Negro colaboró con el equipo y se retrasó a dar una mano cuando fue necesario, fue solidario a la hora de recuperar y entregar el balón y volvió a mostrar su principal característica: la explosión.

En el segundo gol fue quien recuperó el balón detrás de la mitad de la cancha y trasladó la pelota hasta dejar bien ubicado a Mier, para que éste le pusiera un preciso centro de gol a Olivera.

Ya con Godoy Cruz tirado al ataque y dejando espacios atrás, Martinuccio tomó en su cancha un balón rechazado por Darío Rodríguez. Se la llevó con un enganche ante un jugador rival, y en mitad de cancha superó a su marcador “ligando” en el rebote. Trasladó la pelota con muchísima velocidad, y cuando el último zaguero del conjunto mendocino le salió al cruce, el “Porteño” asistió a Luís Aguiar, para que definiera con clase ante un desesperado Torrico.

El Negro volvió a jugar de punta y fue determinante. Si lo hubiese visto el ruso.

Fuente: www.quenonino.com.uy

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